23 de Diciembre 2004
Por exigencias del guion y de las fechas
Leo el otro día que se ha fallado un importantísimo juicio sobre privacidad y Spam, en los EEUU, of course. Un proveedor de servicios de correo ha visto prosperar su demanda a dos empresas generadoras de correo basura, que bombardeaban el servidor con millones de mails diarios. La sentencia establece que dichas empresas han de pagar al demandante una cantidad astronómicamente alta, en plan decenas de miles de millones de dólares. Es más o menos ahí cuando algo empieza a olerme a podrido en Dinamarca.
Sigo leyendo y encuentro el truco. La demanda fue interpuesta y el juicio se celebró, pero las empresas demandadas no dieron señales de vida, ni tan siquiera mandaron abogados al proceso. ¿Cuál es el quid de una demanda por lo civil in absentia? Quedarse a gusto, supongo, por lo cual no dudo que el ejemplo cunda y veamos pronto demandas y juicios tan tremendos e inocuos como ese. Todo sea por la salud mental de los agraviados. En Navidad agrada mucho ver que la gente aun disfruta de las recompensas no materiales.
A alguno le sorprenderá, pero por lo general disfruto de esta época del año. Quizás sea por el pánico a caer en la depresión de adviento, tan demodé, tan poco exclusiva. El caso es que armado de mi sonrisa y mi corpulento físico, me zambullo en la vorágine consumista del españolito medio, incluso acompaño a otros a comprar. No es que disfrute de las aglomeraciones de gente, y vive Dios que las atronadoras cancioncillas del hilo musical son una excusa perfecta para iniciar un genocidio, pero la combinación no me pone de la mala leche que todo el mundo parece beber, sino todo lo contrario. Si queréis ser como yo, seguid estos breves consejos:
- No escuchéis. Si alguien os quiere explicar lo que quiere para Reyes, lo que quiere vuestra hermana, vuestra abuela, vuestro tío, poned cara de interesados, sonreíd, dad las gracias y procurad olvidarlo cuanto antes. El 90% de las cosas que mencionaran serán las mismas que todos los tíos, hermanas y abuelas de España y por lo tanto los compradores más madrugadores las habrán agotado. Pasad de ellas, evitadlas. Y por supuesto, evitad también pensar siquiera en buscar sucedáneos, se trata de no agobiarse, no de ser un cutre. Un pajarito me dijo que te apetecían mucho unas zapatillas Rebooc
- No gastes. Fíjate un presupuesto de antemano y sal a comprar. No seas miserable, pero si estricto, saca el dinero que sea del cajero y deja la tarjeta en casa. Conforme vayas comprando cosas, si ves que te va a sobrar dinero, ni pienses en estirarte con el siguiente regalo. En lugar de eso, cómprate algo para ti. Al fin y al cabo, es Navidad para todos ¿no? Las compras se hacen mucho más agradables si cuando vuelves a casa llevas en la bolsa un disco de sorpresa.
- No te cortes. Si no eres una babosa humana, conocerás bien a la gente a la que regalas cosas (los regalos de empresa no cuentan), así que si ves algo que crees que le haría ilusión a alguno de tu lista, a por ello. Bebe, ir medio pedo de compras proporciona a partes iguales el estupor y la hostilidad que unos grandes almacenes necesitan. Además así tendrás menos escrúpulos y te decidirás antes.
Mi record está en tardar 45 minutos para comprar los 5 regalos que hago todas las navidades, sin hacer lista previa y comprándome además algo para mí. ¿El significado espiritual de estas fiestas? El comienzo del Invierno se ha celebrado siempre con algo tan materialista como una matanza y comilona, Jesús nació en primavera y... que coño, me meo en la boca del niño en la cuna..
17 de Diciembre 2004
Memoria catódica
Si hace una semana dediqué un post a mis películas (temporalmente) favoritas, ahora toca hacer lo mismo con mis series de televisión. A que engañarnos, Señores, a muchos, a la mayoría nos ha criado la tele. O al menos ha tenido un papel muy importante en como somos, anormales, incapaces de dedicarle mucho tiempo a nada por que ¿acaso hay algo interesante que no quepa en el formato de una hora con anuncios?
Erase una vez el Hombre
Todo lo que una serie educativa debe ser y ninguna suele conseguir. De crío no me perdía un capitulo, aunque sus secuelas (el espacio y el cuerpo humano) fueron penosas. La verdad es que vistos ahora, estos dibujos pierden bastante, ni la animación ni los guiones eran gloriosos, pero tener a media chavalería española frente al televisor, atentos a la aparición del Sacro Imperio Germánico tiene su merito. Aunque ahora que lo pienso... Vicky el Vikingo...
Doctor en Alaska
O el realismo mágico cambiado de latitud. Desde la música de los títulos hasta l final, esta serie me tenia fielmente frente al televisor. Uno diría que con el maltrato horario y de calendario que le dedicaban, los fans habríamos desfallecido; nada mas lejos. Émulos del Doctor Fleishman, afrontábamos nuestro particular destierro de madrugada para enterarnos que se cocía por Cecily.
V
La apoteosis de la laca galáctica. ¿Que hay mejor que una historia donde los nazis son los malos? Una donde son Nazis espaciales caníbales, por supuesto. Con uno de los héroes más insufribles que yo recuerde, esta serie altero las hormonas a más de uno, desatándose verdaderas batallas de patio de colegio al grito de ¡Diana está más buena! ¡Julie es la mejor!. Los efectos espaciales eran espectaculares para la época, pero la cosa perdió fuelle tras la primera temporada.
Yo Claudio
Esta adaptación de la novela de Graves, con actores británicos y rodada íntegramente en interiores me tuvo pasmado frente a la tele con 14 años. Lo único que se puede decir en contra de los culebrones es que normalmente tienen un guión de mierda. Esto es un culebrón tremendísimo, con adulterio, incesto, traición y puñaladas traperas, pero esta escrito como dios manda y los actores no se mesan los cabellos grasientos mientras gimen ¡Luis Alfredo!.
Canción triste de Hill Street
La obra maestra de Bochco, modelo a imitar por los cientos de series de policías que vinieron después. Las series policíacas dejaron de centrarse en chulescos detectives para mostrarnos la vida del patrullero. Y sobre todo, que fue la primera serie de televisión que me pude sentar a ver con mis viejos consciente de que todos la disfrutábamos.
Los Simpsons
Es obvio ¿no? Esta serie ha marcado época. Pero como los picapiedra, lo rompedor ya no lo es tanto por pura ley de saturación. Sin embargo aun quedamos los que recordamos cuando la estrenaron en la 2ª Cadena a razón de capitulo semanal. Los Miércoles o los Jueves por la noche, si no recuerdo mal. Eso, amigos míos, fue historia de la televisión.
Dona Beija
Otro culebrón, pero esta vez sin ambages. Basado en un poema decimonónico brasileño, esta historia de Madame de provincias en pos del respeto y la independencia era cojonuda. Dudaba entre mencionar esta o Caballo Viejo, pero aquella no la pude seguir tanto. Quizás la palabra para definir este dramón de época sea serial, con lo que eso evoca. Y se veían tetas... ¡a la hora de la siesta!
La Hora de Bill Cosby
¿Quién no adoraba al bonachón Doctor Hastevol? Yo. Pero bueno ¿Quién no se enternecía al ver a la pequeña Rudy y sus coletas? Vale, tampoco yo. Pero salía Lisa Bonet. ¿Lo repito? Lisa Bonet. Hasta que se fue a protagonizar su propia serie, el programa de Cosby era sagrado. Y cuando ya la vimos haciendo un integral en El Corazón del Ángel, todo lo del tal Cosby pasó a ser prescindible. Además, el muy cabrón la despidió por hacer esa película. Viejo negro nazi...
Galáctica: Estrella de Combate
Siguiendo la estela de StarWars (y con muchos de sus maquetistas), esta serie nos proporcionó una muy necesaria dosis de bichos raros, rayos luminosos y naves espaciales mientras esperábamos a ver El retorno del Jedi. Lastima que fuese de tan corta duración, pero ¿Cuántos de mi generación pensáis que lo mejor de El Equipo A era ver un cylon en los títulos de crédito y a Starbuck haciendo de Fénix?
Los Soprano
Esta es recientita. Todo lo que dije a favor del cine de gansters en mi post sobre el cine se aplica a esta serie. Otro culebrón si lo miras bien, pero uno donde a veces se mata a un barman ruso a tiros en la nieve de un bosque de NewJersey. Placer un tanto elitista, lo admito, dado que aun es solo para abonados al plus. ¿Qué queréis que os diga? Escribid a las cadenas exigiendo su compra para emisión abierta, os estáis perdiendo una joya.
16 de Diciembre 2004
Monólogo avejentado.
Skinner, uno de los padres de la pedagogía moderna, decía que tiene mucho mas valor la zanahoria que el palo a la hora de educar a alguien. El refuerzo material agradable, ya sea en forma de palabras, actos u objetos, consolida mucho más lo que el educador trate de inculcar. El palo, por otra parte, se identificaba subconscientemente con lo que se ha hecho mal, no con lo que se debería haber hecho, y por tanto no existe un condicionamiento positivo en pos de la actitud o respuesta correcta, sino uno negativo hacia una de las muchas incorrectas. Nada que objetar.
Sin embargo esto deja de lado un factor importante, en mi opinión: el miedo.
Por mi condición de Peter Pan friki, trato con adolescentes y post-adolescentes muy a menudo. Más de lo que cualquiera de mi (sigh) edad trataría, si descontamos a profesores y pederastas. Y hay de todo, como en botica, pero percibo según pasan los años una tendencia alarmante, una agresividad verbal acompañada por un absoluto desprecio de cualquier figura de autoridad. Simplificando: cada vez veo mas críos a los que les hacen falta dos leches bien dadas.
¡Violento! ¡Carca! ¿No decías que son mejores los refuerzos positivos?
Me explicare. Cuando yo era crío, si me metía en el camino de los críos mas mayores, corría el riesgo de que me zumbaran. O al menos de que me zarandearan. Era una situación injusta, pero tenia su lógica desde un punto de vista darviniano. Si no eras un lemming, aprendías pronto a no cruzarte en el camino de nadie que te pudiese arrear, a no molestarle. Aprendías a ser prudente, a reconocer que es lo que molesta a la gente para evitarlo, primero por auto-conservación, luego simplemente por habito. Una regla tan sencilla se aplicaba también en casa o con los profesores: si alguien tiene poder sobre ti, de la clase que sea, no le toques los cojones. Si te quieres salir con la tuya, hazlo sin molestar. Así nacen los modales.
Por supuesto con la edad aprendes que para todo hay excepciones, pero la norma básica persiste aun sin temer ya nada. Actúas pensando en como lo que haces afecta a otros no porque te vayan a partir la cara, sino por habito, por urbanidad.
Los críos ahora han crecido rodeados de refuerzo positivo. El acto punitivo ha desaparecido (por el mismo camino que las calificaciones académicas, me han dicho) y nadie admite que su hijo haya hecho nada mal. Su Yosua, señora, no esta pasando una fase, ni sufre de síndrome de falta de atención ni se siente encerrado en su entorno académico. Su Yosua es un cafre iletrado y maleducado que no teme las consecuencias de sus actos.
Y ese es el quid; al desterrar el miedo de la imaginería infantil creamos pre-adultos sin temor a nada. Al interactuar entre ellos, sin unas mínimas normas auto impuestas, se molestan, se ofenden, se agreden. Saben que son sacrosantos, que nadie les va a cruzar la cara por pasarse de la raya, y es cierto, nadie lo hace. Pero cuando de tratar entre ellos se trata, cuando pasan a relacionarse más allá de su casa o el patio del colegio, carecen de cualquier condicionamiento. Llegan a las manos con una facilidad pasmosa, cuando no a otras cosas. Les falta la saludable dosis de miedo, no porque el castigo sea efectivo, sino porque la amenaza del castigo, de las consecuencias, si lo es.
En mis tiempos... jo, que viejo soy.
13 de Diciembre 2004
El Círculo se cierra
Sin ser un ecolopapanatas, al Hombre Malo siempre le han gustado los documentales de naturaleza. Y los de simios, los que más. ¿Para qué sirve Gran Hermano pudiendo observar la vida e intimidad impúdicamente expuesta de estos micos? La somnífera voz del narrador de documentales (siempre es el mismo) lleva años explicándome los intrincados usos sociales de los primates superiores. Sobre todo de mis favoritos, los bonobos.
Son estos una clase de chimpancés especialmente avispados, aventajados en el uso de herramientas y sexualmente promiscuos. No es esto lo que más me interesa, porque para ver gritar de lujuria a monas ya tengo Crónicas Marcianas, me interesan porque aprenden. Y lo que es más, enseñan. Generación tras generación se pasan técnicas de caza, a elegir la mejor piedra para cascar nueces o incluso a practicar juegos que se ponen y pasan de moda como si de pokemón se tratase. Así, se puede diferenciar a un grupo de chimpancés de otros, idénticos en lo básico, por su cultura, compuesta de mil y un detalles.
Hace ya unos años leí sobre un experimento que ahondaba en este tema. En una universidad enseñaron a un grupo de chimpancés a comunicarse mediante signos, dotándoles de un vocabulario de unas 300 palabras. Al poco tiempo, los propios simios estaban añadiendo palabras nuevas a base de mezclar términos para identificar realidades que dicho vocabulario no incluía. Mano + Collar significaba pulsera, árbol +luz identificaba a las farolas... años más tarde, al ir criando este grupo de estudio, los investigadores observaron asombrados que las madres enseñaban a sus crías a expresarse en ese lenguaje, que no paraba de crecer. Por cosas como esas en Nueva Zelanda se ha otorgado legalmente a los grandes primates una condición superior a la de animal, dotándoseles de ciertos derechos.
Por otro lado, buscando al azar por esos foros de dios, se encuentra uno cosas como:
ajajjaja ole ay malaga!!! k bien t a keao illo!! enga basasosss
JOE JOE.......VAYA RECOPILACION DE FOTOS TIO.......JAJA, COMO MOLA..
AI VARIEDAD...YA VES.....AI DE TODOS LOS COLORES Y FORMAS.......MOLA MOLA....
Po si ke hay,xk si las doy,es ke las hay,xk sino las ubiera,dime tu ke hago dando dnd no hay
Solo me queda la duda de si podríamos explicarle a un chimpancé los misterios del tuning. Si así fuera, yo lucharía porque España fuera más allá que nuestras antípodas y diese DNI, carné de conducir y derecho al voto a todo mono mas grande que un macaco
9 de Diciembre 2004
Tarifa libre
Soy un Freelance.
O lo que es lo mismo, soy el tipo al que llamar cuando tienes un trabajo urgente y es ilegal pedirle a tus empleados que lo hagan por cualquier motivo. En el caso que nos ocupa, el motivo era el puente, y el trabajo la maquetación de unos planitos de instalaciones.
Exactamente 800 planos.
Os ahorrare la detallada descripción que de dicha tarea os puedo hacer, baste simplemente comentar que preparar cada plano para imprimir es sencillo, no más de diez pulsaciones de tecla y un par de docenitas de movimiento de ratón, pero que si repites esto ochocientas veces, el efecto en tu cabeza es parecido al de beberte cuatro tequilas del tirón. Pero sin la parte divertida. La repetición mata el cerebro, lo aburre, lo abruma y lo pisotea. Hace una hora que terminé y todavía veo desfilar esquemas de instalaciones eléctricas por mi cabeza.
Hacia el final (los últimos 300 planos o así) ya tardaba menos de minuto y medio por plano, pero para mantener ese ritmo no podía distraerme ni mirar al teclado. Si os parece una tontería, multiplicad. Más de siete horas a ese ritmo. Si no fuese por el dolor, el estado de intoxicación en el que me encuentro estaría entre los cinco mejores que recuerdo.
Y todo por 30mil míseras pesetas, que si no me viniesen tan bien de buena gana habría mandado a tomar por culo el curro este cuando, allá por el plano 150, me di cuenta de que me iba a llevar mas de las 10 horas que preveía. Aunque si no lo hago yo, ya habría algún otro pringao que lo hiciese. En eso se basa, supongo. Porque a un currito de oficina esto no le lleva menos de una semana laboral, que a la empresa le va a salir por más de 30mil.
En fin, me quejo pero otras veces me ha salido mejor la jugada. Hace un año logre facturarle 35 horas a una constructora cuando lo que me pidieron solo me llevo 20. Ya decía yo que no podía ser tan fácil ganar dinero. Todo sea por estar un pasito más cerca de mi granja de cría de prostitutas tailandesas. Y mañana, a jugar a la Primitiva.
3 de Diciembre 2004
Cine, cine, cine... más cine por favor.
Estas cosas cambian, y si escribiese este post dentro de una semana quizás no todas fuesen las mismas, pero llevo unos días sin escribir y más me vale ponerme las pilas. Aquí van, en la mejor tradición de Alta Fidelidad, Mis Diez películas favoritas.
Desde la primera vez que la vi, el personaje de Tony Montana se convirtió en un referente para mí. No, no voy esnifando montañas de cocaína ni tengo armas automáticas tiradas por casa, pero el ideal estético me ha calado hondo.
Blade Runner
A casi todo el mundo le gusta esta película, unos por ci-fi-frikis, otros por el rollo Noir. Personalmente, me encanta por su diseño de producción, por lo envolvente que es. Seguramente la película que más me ha hecho sentirme ahí, y eso que soy fácil de sugestionar.
Cuando siendo yo canijo llegó a casa nuestro primer video, un Betamax, más o menos por el 82 o el 83, mi padre grabó de la tele esta película. En las semanas que siguieron me la debí ver al menos una docena de veces. Llegaba del colegio, me la ponía un rato, al día siguiente un poco más... Me sabía algunos diálogos de memoria. Mel Brooks hizo una versión en color, pero no se le compara ni de lejos a la de Lubitsch.
Los 7 Samuráis
Pongo esta como podría haber puesto alguna otra de Kurosawa ( apuntito he estado de poner Rashomon, pero solo la he visto una vez). El tema principal en el cine de Kurosawa, el deber que tenemos los unos para con los otros, es una de mis obsesiones, y con pocos artistas puedo coincidir más que con él a la hora de plasmarlo.
All that Jazz/Empieza el espectáculo
La erosión física y anímica plasmada por uno de los artistas que mejor la conocieron. Esta es una película sobre el precio del arte y el espectáculo, sobre lo que se sacrifica y lo que se deja de lado. Tan genial y variada como era Bob Fosse, pero lo más importante, sin moraleja. ¿Merecía la pena? Yo creo que si, pero cada cual puede sacar del final lo que quiera.
Puntito gay que solo un hombretón como yo se puede permitir. ¿Qué queréis que os diga? Me gustan los musicales, normalmente mas del estilo de West Side Story, pero Rex Harrison y Audrey Hepburn son, simplemente, divinos. Just get me to the church on time...
Comedia japonesa de los 80 que parodia las convenciones del cine de artes marciales. Rara como ella sola, la historia de una cocinera novata llegando a la excelencia en el mundo del ramen es de por si genial, pero además la película está salpicada de escenas entre lo humorístico y lo profundo, todas reflexionando sobre la comida y la relación de los japoneses con ella. Una película que introduzca la épica en la cocción de fideos ha de ser de visionado obligatorio.
El Imperio Contraataca
La película ineludible para cualquiera de mi generación con dos dedos de frente. Bueno, quizás me pase, pero StarWars es un clásico sentimental, y su segunda entrega (pero quinto episodio, y tercer guión publicado, si me apuras) es la mejor de todas. El dilema del héroe con maquetas molonas y luces brillantes; ¿Por qué nadie ha sabido hacerlo igual de bien que Keshner?
La Mafia me fascina. Quiero decir, son unos criminales, horteras e incultos, pero lo hacen todo por los anhelos y afanes más elementales. Es imposible no simpatizar con ellos, y en ningún sitio se los ha reflejado de una manera tan contundente como en Goodfellas. Esos trajes, esa música, esas caras deformadas por los golpes...
Cada vez que ponen esta película en la tele (esto es, al menos una vez al año en Telemadrid más cada vez que les rota en las otras cadenas y digital+) me engancho a verla y me la termino. Da igual cuantas veces la haya visto, esta película siempre me atrapa. Y cada vez que oigo a Sonny&Cher me acuerdo de ella.